En Clínica Physis, clínica de fisioterapia y rehabilitación en Valencia, llevamos más de 30 años ayudando y favoreciendo el bienestar físico de nuestros pacientes. Como sabéis tratamos de daros información sobre las patologías más comunes en nuestra clínica. Hoy os hablamos de la epicondilalgia lateral, también conocida como «codo de tenista», es una afección que afecta la región externa del codo y se caracteriza por la degeneración y la inflamación de los tendones que se insertan en el epicóndilo lateral del húmero.
Esta lesión suele ser causada por movimientos repetitivos y excesivos de la muñeca y el brazo, especialmente aquellos que implican agarrar, torcer o levantar objetos. Aunque su nombre hace referencia al tenis, la epicondilalgia lateral puede ocurrir en personas que practican otros deportes o realizan actividades que involucran movimientos similares, como el golf, el levantamiento de pesas, la jardinería o incluso tareas domésticas.
Los tendones afectados con mayor frecuencia en esta condición son los del músculo extensor radial corto del carpo y el músculo extensor radial largo del carpo, que se insertan en el epicóndilo lateral del codo. Estos tendones se vuelven dolorosos e inflamados debido a pequeñas lesiones repetidas, conocidas como microtraumas, que se producen cuando los tendones no tienen tiempo suficiente para recuperarse entre los movimientos repetitivos.
Síntomas del codo de tenista o epicondilitis
La epicondilalgia lateral se caracteriza por la presencia de varios síntomas que afectan principalmente la región externa del codo. Estos síntomas pueden incluir:
- Dolor en el codo: El dolor es el síntoma más común y característico de la epicondilalgia lateral. Generalmente se experimenta en la parte externa del codo y puede irradiarse hacia el antebrazo y la muñeca. El dolor suele ser de intensidad variable, desde leve hasta intenso, y puede presentarse como una sensación de ardor o molestia.
- Dolor al agarrar objetos: El dolor tiende a aumentar al realizar actividades que implican agarrar objetos, como al sostener un raqueta de tenis, una pesa, una herramienta de jardinería o incluso al levantar una taza. El agarre firme o la torsión de la muñeca pueden agravar el dolor.
- Sensibilidad en el área afectada: La región externa del codo puede volverse sensible al tacto, especialmente en el epicóndilo lateral. Al presionar esta área, es posible experimentar dolor y sensibilidad localizada.
- Debilidad en el antebrazo: Algunas personas pueden notar una sensación de debilidad en el antebrazo afectado. Esto puede dificultar la realización de actividades que requieren fuerza, como levantar objetos pesados o apretar con fuerza.
- Limitación en el movimiento: En algunos casos, la epicondilalgia lateral puede causar limitación en el rango de movimiento del codo y la muñeca. El dolor y la inflamación pueden dificultar la extensión completa del brazo o la flexión y extensión de la muñeca.
El diagnóstico de la epicondilalgia lateral se basa principalmente en la historia clínica del paciente, los síntomas descritos y un examen físico realizado por un médico. En algunos casos, pueden ser necesarios estudios de imagen, como radiografías o resonancias magnéticas, para descartar otras posibles lesiones o evaluar el grado de degeneración de los tendones.
¿Qué tratamiento se recomienda en caso de padecer epicondilitis o codo de tenista?
El tratamiento de la epicondilalgia lateral se centra en aliviar el dolor, reducir la inflamación y promover la curación de los tendones afectados. Esto puede incluir medidas como reposo, modificaciones en la actividad física, terapia física para fortalecer los músculos y tendones, uso de medicamentos antiinflamatorios y, como mencionamos anteriormente, el tratamiento con ondas de choque que estimula la regeneración de los tejidos.
Es importante destacar que el tratamiento de la epicondilalgia lateral debe ser individualizado, y se recomienda consultar a un médico especializado para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado a cada caso en particular.
Ondas de choque como tratamiento de epicondilalgia lateral
La epicondilalgia lateral puede ser una lesión dolorosa y debilitante. Afortunadamente, existen varios tratamientos disponibles para aliviar los síntomas y promover la recuperación, y uno de los enfoques más recomendados por los profesionales de la salud es el tratamiento con ondas de choque. Es una terapia no invasiva que utiliza ondas acústicas de alta energía para estimular la regeneración de los tejidos y reducir la inflamación en la zona afectada. A continuación, se presentan algunas razones por las cuales este tratamiento se recomienda con frecuencia para la epicondilalgia lateral:
- Eficacia comprobada: Numerosos estudios clínicos han demostrado la eficacia del tratamiento con ondas de choque en el alivio del dolor y la mejora de la función en pacientes con epicondilalgia lateral. Las ondas de choque ayudan a estimular la curación de los tejidos afectados y a promover la regeneración celular, lo que lleva a una reducción significativa de los síntomas.
- Tratamiento no invasivo: A diferencia de otras opciones terapéuticas, como la cirugía, el tratamiento con ondas de choque es no invasivo y no requiere incisiones ni anestesia. Esto significa que los pacientes pueden evitar los riesgos y los tiempos de recuperación asociados con los procedimientos quirúrgicos, lo que lo convierte en una opción más segura y conveniente.
- Ausencia de efectos secundarios significativos: En general, el tratamiento con ondas de choque se considera seguro y no suele tener efectos secundarios significativos. Algunos pacientes pueden experimentar un ligero malestar o enrojecimiento en el área tratada, pero estos síntomas suelen ser temporales y desaparecen rápidamente.
- Evita el uso de medicamentos: A diferencia de los medicamentos antiinflamatorios orales o las infiltraciones de corticosteroides, el tratamiento con ondas de choque no implica la ingesta de fármacos. Esto puede ser beneficioso para aquellos pacientes que desean evitar los posibles efectos secundarios asociados con los medicamentos o que prefieren opciones de tratamiento más naturales.
- Mejora a largo plazo: Además de aliviar el dolor a corto plazo, el tratamiento con ondas de choque puede tener beneficios a largo plazo. Estimula la curación de los tendones y promueve la regeneración de los tejidos, lo que puede llevar a una mejoría duradera en los síntomas y una mayor funcionalidad del codo afectado.
Es importante tener en cuenta que cada paciente es único y que los resultados del tratamiento con ondas de choque pueden variar. Por lo tanto, es fundamental consultar a un médico especializado para determinar si esta opción es adecuada en cada caso y para recibir una evaluación precisa y un plan de tratamiento individualizado.
Si crees que podemos ayudarte no dudes en contactarnos y pedir cita con nuestros especialistas en fisioterapia y rehabilitación.