Tendinitis en el hombro

El hombro es la articulación que tiene la mayor amplitud de movimiento y por lo tanto es una de las articulaciones que más lesiones de carácter tendinoso desarrolla, sobre todo porque requiere de movilidad en todas las direcciones, además de fuerza y estabilidad para poder llevar a cabo las actividades en las que se ve involucrado.

Por eso, es frecuente que sufra diferentes patologías y principalmente la tendinopatía del tendón del supraespinoso es uno de los síndromes dolorosos más frecuentes en las personas. La tendinopatía del supraespinoso puede producirse por varias cau- sas: la más frecuente es el pinzamiento del mismo tendón debido a su disposición anatómica ya que en su estrecho recorrido se ve entre la cabeza humeral en su parte inferior y el acromion y el ligamento coraco-acromial en su parte superior. A todo este conjunto se le conoce como espacio subacromial.

Una alteración de la biomecánica articular normal del hombro por diversos factores como alteraciones posturales, factores traumáticos o de sobreuso, factores genéticos o hereditarios, artrosis y degeneración articular, calcificaciones o alteraciones del correcto equilibrio muscular del hombro puede provocar que se altere el espacio subacromial generando un cizallamiento y fricción con la consecuente alteración del tendón.

LOS SÍNTOMAS DE PADECER TENDINITIS EN EL HOMBRO

En fase aguda, cursa con dolor en la cara anterior y lateral del hombro y aumenta por la noche. El dolor puede verse irradiado por el lateral del brazo hasta el codo. Se podría ver afectada la musculatura cervical de ese lado del hombro afecto.

Existe un arco doloroso entre los 60-120o de separación del brazo del cuerpo debido a que en ese tramo el tendón roza con el acromion. En fase crónica, la bursa subacromial se puede engrosar y generar un dolor más intenso. Puede existir crepitación, una limitación de la movilidad (principalmente la elevación, la separación y la rotación ).  Actividades de la vida cotidiana tan simples como vestirse o asearse se convierten en difíciles tareas a realizar.

Si la tendinopatía se alarga en el tiempo sin una solución a la lesión, podrían producirse indicios de microrotura, rotura parcial o total del músculo supraespinoso. Acude a la clínica y consúltanos si crees que tu dolor de hombro puede ser debido a esta tendinopatía.

TRATAMIENTO DE FISIOTERAPIA

Disponemos de un amplio número de técnicas para aplicar a la tendinopatía del supraespinoso y que combinadas de manera correcta son la herramienta perfecta del fisioterapeuta.

1 Terapia manual: la manipulación articular y la movilización pasiva nos ayudarán a conseguir movilidad al hombro y a las zonas periarticulares del mismo.

2 Realización de ejercicio y estiramientos activos: importante para conseguir la relajación, la amplitud de recorrido articular y estabilizar el hombro. Cuando hayamos conseguido mejorar la movilidad, es necesario fortalecer y potenciar el hom- bro para evitar la atrofia muscular. Para todo esto podremos hacer uso de pesos, palos o cintas elásticas.

3 Electroterapia: cuando hay una etapa aguda de dolor, nos ayudará a conseguir analgesia y a disminuir la inflamación del hombro. Radiofrecuencia, magnetoterapia, rádar, ultrasoni- dos y TENS podrían ser utilizados para este fin.

PREVENCIÓN DE LA TENDINOPATÍA

Es importante tener una actitud de prevención ante este tipo de lesiones tan frecuentes. Para prevenir la tendinopatía del supraespinoso

  1. hay que evitar los movimientos repetitivos y excesivos de la articulación del hombro,
  2. actividad deportiva constante de tonificación de la musculatura para proteger la articulación.
  3. Debemos evitar la mala alimentación, hábitos tóxicos y estrés continuado ya que pueden contribuir a que se produzca más rápidamente un problema tendinoso como la tendinopatía del supraespinoso.