La rotura fibrilar es un desgarro muscular, una lesión del músculo donde lo que ocurre es que las fibras que componen ese músculo se rompen. Ese desgarro lo que provoca es un dolor muy agudo y muy intenso que lleva al paciente a parar la actividad que estaba realizando.
Señales que indican una rotura fibrilar
En lo que coinciden todas las personas que sufren alguna rotura fibrilar de gemelo es que notan un dolor muy intenso como que hubieran recibido una pedrada en el gemelo y de repente se ven obligados a parar porque el dolor es muy intenso.
¿Qué hacer ante una rotura fibrilar?
Lo primero que debemos hacer es dejar el músculo afectado en reposo, aplicar frio para bajar la inflamación y ver qué tipo de rotura es y qué alcance tiene.
En general una rotura fibrilar cicatriza por si solo porque el músculo tienen la capacidad de reunir todas esas fibras pero si que es verdad que para un une regreso correcto a la actividad deportiva y prevenir futuras lesiones requiere un tratamiento de fisioterapia.
¿Por qué ocurren las roturas fibrilares?
Puede ocurrir porque hay un tipo de contusión o golpe y el músculo se vea interrumpido provocando ese desgarro o que se haya estirado mas de lo debido y que se produzca el desgarro.
¿Cuánto tiempo de recuperación necesita una rotura fibrilar?
Depende de las características de esa rotura fibrilar. Si es leve puede durar 8-10-12 días. Si es mas evidente la rotura de fibras puede durar un mes y si ha habido una rotura donde hay una extensión grande de fibras musculares puede ir de uno a tres meses
¿Qué hace la fisioterapia en estos casos?
Disminuir el dolor e inflamación
Movilización pasiva suave
A las dos semanas se puede aplicar calor para trabajar la zona de forma mas activa donde intervengan mas las fibras.
Estiramientos de gemelo y más adelante, cuando no haya cojera ni se use muleta, se enseñan ejercicios de readaptación muscular en carga para una recuperación total de la zona. Aquí hay un trabajo más duro de esa musculatura y hay una estimulación de fibras para que haya una recuperación de las fibras de colágeno para que la unión sea correcta y evitar que al mínimo esfuerzo se vuelvan a romper.
Cómo evitar la rotura fibrilar
Calentamiento de articulaciones.
Estiramiento de musculatura.
Hidratación correcta con agua o bebida isotónica.
Sí notamos el músculo fatigado no extender más allá y hacer caso a las señales de nuestro cuerpo.
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